¿Sufres de dependencia emocional?
Es muy común encontrar en las redes sociales todo tipo de iconos que nos muestran cuál es el ideal de amor para la sociedad, la mayoría de ellos nos hablan de un amor que duele, de un amor en el que hay que sufrir para que sea amor verdadero, un amor en el que se concibe a la otra persona cómo parte necesaria de uno mismo….
Ésta y otras muchas ideas preconcebidas sobre el amor romántico hacen que sea percibido como algo sano, cuando lejos se sitúa esta idea del amor sano.
Hoy hemos decidido dedicar nuestro blog a hablar de la dependencia emocional, por considerarlo un tema que nos atañe a todos y cada uno de nosotros. Es posible que tengas algún amigo que desaparece en el momento que se echa pareja, o te preguntas cómo aguanta ciertos comportamientos de su pareja, o incluso tú mismo has sufrido en algún momento de tu vida alguno de los comportamientos de los que hoy hablaremos aquí.
Y es que la dependencia emocional no sólo es fruto de las ideas preconcebidas de nuestra sociedad, también de la forma en la que se relacionaban nuestros padres o cómo gestionaban nuestras emociones, todo ello nos influye al elegir a nuestra pareja. Nos sentimos atraídos por esa persona porque reúne las características del modelo que recibimos sobre el amor, de lo que nos enseñaron que era querer.
Muchas veces ese modelo de cómo es que te quieran no es lo que más nos conviene, nos lleva a permanecer en relaciones en las que damos más de lo que recibimos. Es en estas relaciones de dependencia emocional, donde vemos una clara falta de correspondencia entre lo que el dependiente da y lo que recibe. Invierte tanto en la relación de pareja que se pierde a sí mismo, siendo su prioridad invertir su tiempo en esta relación por encima de las demás, distanciándose de familiares, amigos e incluso teniendo problemas en la asistencia a sus responsabilidades (trabajo, estudios, crianza de los hijos e hijas…).
Estas relaciones suelen estar teñidas por la sumisión, la idealización del otro y el miedo al abandono o terror al rechazo; llegando a soportar humillaciones por parte de la otra persona con tal de que continúe a su lado.
El objetivo de este artículo es la identificación de la dependencia emocional, para ayudarte a reconocer si estás siendo objeto de ella o conoces a alguien que lo padezca. Por tanto, a continuación comentaré algunas de las características presentes en la dependencia emocional y que podemos ver divulgadas como socialmente aceptadas:
Mi pareja objetivo vital de primer orden
Mi pareja está por encima de todo incluso de mí mismo.
Todo lo importante en mi vida antes de conocer a mi pareja pasa a un segundo plano cuando está a mi lado. Incluso mi estado emocional DEPENDE de cómo está el de mi pareja.
Ansia de contacto constante
Procuro estar todo lo posible con mi pareja, ¿y qué pasa cuando por obligación no puede ser así? Gracias al móvil y a las redes sociales satisfago mi ansia constante de estar en contacto con mi pareja. Esto es tan excesivo que puede llamar la atención de mi entorno o del entorno de mi pareja.
Exclusividad extrema
Quiero a mi pareja solo para mí, normalmente en la relación no se hace lo que yo quiero… pero si por mí fuera sólo saldría con mi pareja y mi pareja conmigo.
Pareja idealizada
Es mejor de lo que pudiera soñar. Le admiro, sé que está por encima de mí…. Es la persona más guapa con la que he estado, la mejor en su trabajo, lo mejor que podría tener a mi lado.
Sumisión ante la pareja
Me siento inferior a mi pareja y me dejo humillar o infravalorar. Soporto cualquier cosa con tal de estar a su lado, sus necesidades son más importantes que las mías.
Terror ante el posible abandono o ruptura
Vivo la relación en continua alerta, escaneando constantemente todos sus mensajes en busca de señales que alivien mi temor a que me rechace.
Prefiero estar con mi pareja fatal que imaginar mi vida sin ella.
Por tanto, cuando la relación no va bien, la persona dependiente emocional se siente morir, es decir, todo su mundo se viene abajo, construido en función de su relación de pareja. Comienza entonces un síndrome de abstinencia, con síntomas comunes a la abstinencia ante una adicción.
Éstas son algunas de las características de los dependientes emocionales.
Sería importante señalar qué perfiles de personalidad buscan los dependientes o qué pautas pueden aliviar y ayudar a superar el síndrome de abstinencia ante una ruptura; así como la identificación de pautas sanas en una relación de pareja como forma de prevención para la persona que sufre dependencia emocional, ya que, sin una intervención adecuada, el dependiente se verá implicado continuamente en relaciones tóxicas en las que cotiza más al otro que a sí mismo, poniendo en riesgo su autoestima.
Es por ello que os indico la bibliografía en la que me he apoyado al escribiros y que os recomiendo consultéis si padecéis o conocéis a alguien que padezca algunos de los comportamientos de los que aquí hemos hablado.